Muchos niños disfrutan del aprendizaje, de lo nuevo que
les puede traer el colegio, y también de cada nuevo reto. Hay pequeños que
están deseando saber más por ejemplo, de matemáticas. Sin embargo, para otros puede
ser un auténtico suplicio tener que sentarse frente al papel y resolver los
ejercicios de clase.
Si nuestros hijos tienen problemas a la hora de hacer multiplicaciones y
queremos animarles y ayudarles a que lo entiendan, es necesario que conozcamos
juegos y trucos que les enseñen de forma fácil.
Juegos para que los niños aprendan las tablas de
multiplicar
Para que aprendan cómo multiplicar, existen diversos trucos
que podemos tener a mano en un momento dado:
- El juego de las canciones: Si lo que queremos es que se aprendan las tablas de multiplicar de carrerilla, solamente tenemos que echar la vista atrás y recordar nuestra infancia, donde existían esos cánticos con los números que rimaban, al más puro estilo '6x4 = 24; 6 x 6 = 36...' es más fácil que lo recuerden de esta manera.
- El juego de los pares con rimas: Si lo que queremos es que entiendan que cuando un número par se multiplica por otro par, da lugar a otro de la misma condición, y el resto de reglas de multiplicacion, podemos jugar con las rimas para que termine por entenderlo: 'impar por par, par ; par por par; par', al principio le puede costar un poco, pero después lo dirá de carrerilla. Y lo mejor de todo: le facilitará aprender luego el resultado de las tablas.
- El juego de la tabla del 9: Cuando ya lleven avanzado su aprendizaje, existe el cuento de la tabla del 9 para cuando ya sean auténticos expertos en multiplicaciones, que hace alusión a Robin Hood, que robaba a los ricos (el dígito de la derecha), para dársela a los pobres (el dígito de la izquierda), conforme va avanzando la tabla. Nunca olvidarán el juego y les será mucho más sencillo aprender la tabla más complicada. Aquí tenemos el ejemplo:
9 X 1 = 9: Aquí tenemos el primer número. Para saber cuánto es 9 x 2, hay que restarle uno al dígito de la derecha ( 9 - 1 = 8), y aumenta uno delante, por lo que el resultado se transformará en 18. Cuando continúen, 9 x 3 será 27, y ocurrirá lo mismo, el dígito de la derecha baja uno (8 - 1 = 7) y se añadirá uno más delante (de uno, pasa a dos); y así sucesivamente. Seguimos con 9 x 4 = 36, un dígito más a la izquierda (donde estaba el 2 del 27, y uno menos en el de la derecha). Si la fábula de Robin Hood la cogen a la primera, podrán saber que fácilmente, los dígitos irán bajando en el númerode la derecha y aumentando en el de la izquierda.