TÉCNICAS PARA FOMENTAR EL PENSAMIENTO CREATIVO Y CRITICO DEL ESTUDIANTE
FOMENTAR EL PENSAMIENTO CRÍTICO
¿Qué hace falta para que un alumno aprenda algo? ¿Que sea capaz de repetir la información que le llega? ¿Que pueda memorizarla para transcribirla en un examen? ¿Que entienda el valor y la utilidad de lo que está introduciendo en su memoria?
Para APRENDER, no para memorizar,
hace falta comprender, e incluso para poder almacenar en la memoria ayuda mucho
el entender y dar significado a lo que se está almacenando.
Comprender es utilizar el PENSAMIENTO
CRÍTICO, y dar respuestas no es la forma de promover este modo de pensar, sino
HACER PREGUNTAS.
El profesor, maestro o formador sólo
debe cambiar su situación en el plano: ya no es un transmisor, ya no se trata
de un monólogo en el que él habla y los demás escuchan, sino que se convierte
en un guía, en un mentor de un proceso de búsqueda de aprendizajes
significativos por parte de los alumnos. Se convierte en un “coach“, anglicismo
muy manido ya a estas alturas, pero que describe una forma de trabajo realmente
útil.
Como dice Ignacio Andrío, director
del proyecto Educoach: “Nuestra misión, en contra de lo que quizá nos
enseñaron, no consiste en dar respuestas correctas, sino en saberformular
preguntas que estimulen la creatividad de los alumnos de modo que generen
respuestas diferentes a las ya dadas.”
En la misma línea se encuentra el
concepto de Escuela Inteligente, de David Perkins, doctor en Matemáticas e
Inteligencia Artificial por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y
profesor en la Escuela de Educación de la Universidad de Harvard, dirige el
Proyecto Zero junto a Howard Gardner:“Escuelas inteligentes son las que
introducen todo posible progreso en el campo de la enseñanza y el aprendizaje
para que los estudiantes no sólo conozcan, sino que piensen a partir de lo que
conocen….”
Existen estrategias de enseñanza que
favorecen que gran parte de la responsabilidad del proceso de aprendizaje
recaiga sobre el alumno, y que su trabajo sea el de APRENDER, no sólo el de
estudiar. Son estrategias que se pueden aplicar con éxito a cualquier
asignatura y a cualquier actividad en el aula, adaptarse a todas las edades y
contextos, y que tienen como finalidad PENSAR PARA ENTENDER las cosas, entender
COMPARTIENDO conocimientos y REFLEXIONAR y ANALIZAR lo que se aprende.
10 Técnicas sencillas para utilizar en el aula
·
Hacer preguntas durante las
clases, para estimular la curiosidad: “¿Qué pasaría si…”?, “¿Cómo es posible
que…?”, “¿Qué harías tú en ese caso…?”, “¿Qué sabéis acerca de…?, y diseñar
preguntas guía, que ayuden a reflexionar y clarificar los conceptos más
importantes.
·
Utilizar gráficos y oraciones
sencillas que introduzcan o enfoquen el tema planteado.
·
Exponer distintos puntos de vista
acerca de un mismo tema. Por ejemplo un conflicto bélico contado desde la
visión de cada uno de los bandos implicados.
·
Activar la participación de todos
los alumnos utilizando alguna técnica de “participación al azar”. Por ejemplo,
escribir tarjetas con los nombres e ir eligiendo de una en una para contestar,
preguntar o comentar durante la clase.
·
Fomentar que los alumnos se
conozcan entre ellos, que trabajen juntos y que utilicen la escucha activa,
pidiendo que resuman con sus palabras lo dicho por otro compañero.
·
Hablar menos para hacer que los
alumnos piensen más, mediante paros en la clase para que trabajen y reflexionen
sobre los temas que se han tratado.
·
Utilizar el método socrático para
hacer preguntas y organizar debates entre los alumnos sobre temas que generan
controversia.
· Fomentar el trabajo colaborativo,
a través de trabajos en pequeños grupos, donde a parte de completar la tarea
solicitada tengan que previamente describir los objetivos, exponer qué
estrategias utilizaron y cómo resolvieron sus problemas.
· Promover la “revisión por pares”
de trabajos escritos, de manera que puedan recibir retroalimentación no sólo
del profesor, sino de los compañeros,y así aprovechar los beneficios de la
escritura y lectura activas.
·
Utilizar la técnica de la clase
invertida, donde los trabajos de lectura, documentación y búsqueda de
información se realizan en casa, utilizando el espacio del aula para
investigar, profundizar, practicar, resolver dudas y debatir sobre el tema
tratado.
·
Conocer cuáles son las
competencias que favorecen el desarrollo del pensamiento crítico, ayuda a
profesores de todas las etapas a determinar en qué medida están interiorizando
los alumnos estas formas de pensar y permite intervenir adecuadamente en este
proceso.